LOS SABUESOS DE WALPURGIS

España, tras la fuerte política ejercida por el rey Carlos, se erigía como potencia por sobre las otras grandes naciones del continente. Sin embargo, el viejo monarca, enfermo y retirado en el apartado monasterio de Yuste, delegaba en su hijo Felipe y en su hermano Fernando el poder del reino y del imperio concentrado hasta allí en su sola persona. 

Muchos ven en esto una oportunidad única para disputarles el poder a los españoles, incapaces de controlar todas sus posesiones y mantener, a la vez, el comercio fluido con Las Indias. El rey francés Enrique II, entre estos, es seducido por un aliado poderoso, el febril Pontífice de Roma Paulo IV, quien lo convence de abjurar de los tratados de paz y apoderarse así de ciertos territorios en poder de su majestad española.

Mientras tanto, en el epicentro de la península una idea muy antigua resurge con poder inusitado, la brujería, que emerge con ímpetu bajo las palabras hábiles y seductoras de la inquisición, y cuya idea restaurada será el punto de partida para derrotar la conjura alentada por Roma. 

Viejos acontecimientos comienzan a tomar importancia y hechos misteriosos darán cuenta de que no todas las historias fantásticas se basan en supuestos. 

Intriga, magia, guerra, amor, se dan cita en la España de mediados del S.XVI, en donde el Sumo Inquisidor español, Fernando Valdés y Salas, utilizará todos los medios a su alcance para mantener velado el que sin duda constituye hoy uno de los secretos más oscuros en la historia de la Inquisición